Rigo, uno de los nuestros
En memoria de Rigo Rivera. Un hombre respetuoso, un amigo cariñoso, un hermano como ninguno y un tío excepcional. En memoria de una excelente persona. 25.06.1959 | 23.02.2020 “Se nos fue tío Rigo” – me escribió mi papi. Un mensaje corto, pero doloroso. Leerlo se sintió como un balde de agua fría. Con el cambio de horario aquí ya era lunes por la mañana. Vaya inicio de semana. Ese día lloré porque de verdad no podía creer que su gran amigo se había ido. Lloré mientras cuestionaba por qué las mejores personas se van más rápido. Lloré porque no podría estar ahí, y lloré mucho más porque por meses postergué enviarle un mensaje. Yo quería hacerle una e-card elaborada, algo especial, pero un simple mensaje hubiese bastado. Para el consuelo de las personas que lo queríamos, y que no pudimos estar presentes en su sepelio, nos comentaron que la misa fue algo fuera de lo común. Muy llena de paz, tranquilidad y esperanza. Por cosas de la vida, Rigo era amigo del sacerdote de la parroquia. Cada domingo, además de pasar tiempo con sus adorados sobrinos y sus hermanas Liliana y Mime, él asistía a la iglesia, por lo que el sacerdote le conocía muy bien, y eso le permitió agregarle un toque personal a la misa. Tan personal, que se habló de carneadas y bicicletas. A Rigo le enamoraban las bicis, junto con el grupo de amigos, coordinaban roles en las cercanías de Tegus, o en Tatumbla, para ir a pedalear los fines de semana. Él era el líder del pelotón. En realidad, era un apasionado de muchos deportes. Fórmula 1, racquetball, basketball, fútbol, football… you name it. Mi papi me cuenta que su gran pasión era el basket, pero por un problema en su rodilla no pudo seguir jugando. Como buen aficionado, su jugador favorito era nada más y nada menos que el rey, Michael Jordan. Por más de tres décadas, su casa fue la sede designada para ver todo el repertorio deportivo que la televisión por cable pudiera ofrecer. Especialmente los partidos de nuestra Selección. Y claro, también fue sede para muchas fiestas. Él era el imán que atraía a Los Bukis y Las Pirañas para reunirse y pasar un buen tiempo juntos. No se extrañen de esos nombres tan graciosos y peculiares, así se autodenominaron mi papá y sus amigos. Aunque Rigo no esté aquí, seguirá siendo un buki y un piraña vitalicio. Nadie nunca le reemplazará. De él se hablan maravillas, pero sobre todo se habla de su don de gente, su empatía, su buen corazón, su incondicionalidad con sus seres queridos y su alegría para vivir la vida. Cualquiera que lo conociera se daba cuenta de inmediato, y es por eso mismo que es tan querido, y que por ende, su partida cala tanto. El mundo necesita más personas como como Rrrreagan – así le llamaba mi papi –. Reagan le enseñó a planchar camisas, aunque para ser sincera no sé que tan bien puso en práctica lo aprendido. También bautizó a mi abuelo con el nombre “El Alcalde de Cervenia”, porque literalmente tenía montado en la casa un depósito de la cervecería hondureña. (Wow jajaja). Si mi papi no estaba en la casa, muy probablemente estaba donde él, viendo algún partido, planeando el siguiente rol, o simplemente pasando el rato. Cuando mi papi mira a un ciclista en la calle, le pita o a veces baja el vidrio para animarle. Nos dice a mi hermana y a mí: “Niñas, ¡es de los nuestros!” . Yo estoy segurísima que Rigo ya puso a pedalear fuerte al Colocho – como él lo llamaba – y que obviamente ya lo vistió de Gator. Hoy le quiero decir que usted es uno de los nuestros, para siempre. Aunque ya pasó un mes después de esa mañana gris, confieso que acabo de llorar; pero ha sido un llanto de emoción y nostalgia, que solamente espera de corazón que este homenaje póstumo sea bien recibido allá arriba. Extrañaré encontrarlo ocasionalmente en el super, siempre con su look deportivo y su sonrisa cálida, pero le aseguro que lo recordaré con muchísimo cariño, tío Rigo. ¡Un abrazo grande hasta el cielo! Vivi Epílogo: Les quiero presentar a Los Bukis y Las Pirañas, el combo completo: Rigo, don Juanky, don Allan, don Jorge, don Sergio, don Miguel, don Panda, don Chito, don Tavo, don Rubén, don Dante, don Miguel C, don Mauricio, don Tito, don Carlos, don Samuel, don Jorge Bandy, don Fernando y mi papi, Eduardo. Una amistad especial – que no acaba el día de su partida. Esto también es para ustedes. Y como ellos son tan amigos, es natural que esa amistad impactara también la vida de sus hijos. A pesar que hace más de 10 años no nos reunimos todos por motivos de distancia; Nikki, Allan, Daniel, Nat, Nicky, Jorgito, Andre y yo (sus sobrinos adoptivos) nos hemos unido en este espacio para recordar con mucho cariño lo especial que Rigo fue en nuestras vidas también. Los Kestenbaum Nikki – "Una noche, cuando andaba roleando con mis amigas en un lounge en Tegus (que ni me acuerdo cómo se llamaba), me encontré a Rigo y Juanky. Mi amiga que iba a darme jalón se fue temprano y yo sabía que si le pedía jalón a Rigo, mi papá no se enojaría conmigo si llegaba tarde a la casa. Pero bueno, le avisé e igual se molestó porque yo había prometido llegar temprano. Esa noche, Rigo me fue sermoneando todo el trayecto en el carro que ese chavo con el que me había visto no era buen chavo, que no me quedara con él y que la persona con la que tenía que quedarme tenía que ser alguien que me valorara. Tengo la satisfacción de decir que logró conocer a Miguel, y que se cayeron bien. Te vamos a extrañar mucho, Rigo. " Allan – "Una vez, andábamos de pijín con mis aleros, y mi papá y Rigo me fueron a recoger. Me monto al carro y Rigo me pregunta: '¿tenés novia, confitío?'. Yo le contesté 'no Rigo, es que me cuesta hablarle a las chavas.' Él me respondió: 'es lo justo, confitío'. Medio me resentí, pero Rigo siguió hablando, y me dijo: 'no podés ser guapo y tener el mismo conocimiento mío de las babies.' 😅😅😅 Cuando todavía estaba sin novia, y tenía pena de ir a hablarle a una chava, solo de Rigo me acordaba. 😊 Dos semanas antes de que muriera Rigo, fui a dar una corrida larga ya que estaba entrenando para una media maratón. A la octava milla, no sé qué me dio, pero me puse a pensar en Rigo, y decidí correr otra milla más en nombre de él, por el hecho que en ese momento seguía en el hospital y no podía correr ni hacer ejercicio. Por el hecho que el correr todavía me emocionaba y me podía dar algo de adrenalina, algo que yo no sabía si Rigo iba a poder volver sentir. Al terminar con mi corrida, grabé un mini video en los medios sociales hablando de esto y mis pensamientos hacia el final de mi corrida. Esto fue como a las 2 o 3 de la tarde. Nunca, no en esta ni en otra vida, me hubiera imaginado que esa misma noche a las 8:30 iba a fallecer Rigo, el hermano de mi papá." Natalie – "Desde pequeña siempre tuve el apoyo incondicional de Rigo. Llegó a ser como mi segundo padre. Siempre me aconsejaba y quería lo mejor para mí. No importaba cuanto tiempo pasara sin verlo o sin hablarle, cada vez que tuve la oportunidad de estar con él, me trató como a una hija y aunque me hará mucha falta, mantendré para siempre en mi corazón y en mi mente todos los momentos bonitos que pasamos en familia, sus palabras y consejos.” Daniel – "Hice este retrato de Rigo la última vez que lo vi en Houston, Texas. Se titula RIGOporDAK ." Los Massu Jorgito – "Uno de mis momentos favoritos con Rigo fue en el 2010. En ese año fue el mundial de fútbol y fuimos a la casa de Rigo a ver casi todos los partidos de la clasificatoria. Mi papá, Rigo y yo celebrando los goles con una emoción increíble, abrazándonos, y gritando con todo. Cuando ya llegó el mundial nos levantamos a las 4 de la mañana para ir a la casa de Liliana (su hermana) a ver los partidos de Honduras. Me gustó esto porque compartíamos la misma pasión por los deportes. Cuando estaba con Rigo nunca faltaba un abrazo fuerte pero cariñoso y los interminables 'love you, bro' que siempre me decía. 😊" Nicky – No hubo una tan sola vez en la que un saludo de Rigo al verme no fuera especial y lleno de entusiasmo, de alegría. Todavía recuerdo claramente su voz y el clásico: “Holaaaaa Nicky linda, ¿cómo le ha ido?”, siempre atento a saber de mi vida, aconsejándome y siempre me decía usted es como una sobrina para mí. Y así lo sentía, más que un amigo de mi papá fue un HERMANO para él. Gracias Rigo por sus consejos que siempre venían acompañados de algún comentario chistoso o alguna ocurrencia, siempre era un gusto escucharlo y platicar con usted, verlo reír y gozar con mi papá y los demás amigos. Es triste pensar que ya no está fisicamente pero siempre, siempre estará en nuestros corazones y en los buenos recuerdos que tenemos con usted. 💕 We love you! Las Pavón (also known as las Olsen twins Vivi – Yo recuerdo muchísimo cómo vivimos la eliminatoria rumbo al mundial de Sudáfrica 2010. Para cada partido, nos reuníamos todos en su casa. Cuando digo todos, en serio, todos. La pasábamos súper bien, no olvido el relajo y las travesuras de Daniel y Jorgito, y cómo les empezaron a llamar "Los Hooligans". La última vez que estuve con él, si no me equivoco, fue hace un año en un almuerzo en la casa de mi amigo Oscarito. A él le fue la primera persona que vi al bajar las gradas y fui rapídisimo a saludarlo. Nos hicimos una selfie y se la mandé por Whatsapp. Me dijo "Muñeca, cuidese y que el Colocho la proteja". Gracias por todo el cariño que nos dio. ❣️ Andre – Uno de mis últimos recuerdos con Rigo fue la Vuelta Ciclística de El Heraldo hace más o menos un año. Él pasó recogiéndonos a las 5:00 AM para estar a tiempo en la competencia. A mí me costó muchísimo terminarla, pero mi papá y él estuvieron esperándome todo el tiempo. Cuando finalmente crucé la meta, nos comimos una pizza entera que nos regalaron y nos tomamos una cerveza para hidratarnos. Él era una persona sumamente especial y siempre le recordaremos con una sonrisa. 🚵♂️💙 Lo queremos y lo vamos a extrañar muchísimo. Que descanse en paz. VQV